Grillo en charla para psicólogos sobre la Ley Micaela

Organizada por el CJG y el Colegio de Psicólogos


La presidenta del Superior Tribunal de Justicia, Iride Isabel María Grillo, participó de este encuentro denominado: “La Ley Micaela como obligación del Estado Argentino, responsabilidad de profesionales de la psicología”, que organizó el Centro Judicial de Género – CJG- con el Colegio de psicólogos del Chaco y contó con 55 espectadores.

Luciana Sampietro, directora del CJG, comentó que la iniciativa surgió de Ana María Delgado, presidenta del Colegio de psicólogos, quien propuso una instancia de capacitación destinada a profesionales y estudiantes, y que les pareció oportuno incluirla en el mes de noviembre, junto a la serie de actividades previstas por el CJG en virtud de que el 25 es el día internacional de eliminación de violencias contra las mujeres. Sampietro recordó que la fecha alude a la historia de las hermanas Mirabal, mujeres dominicanas víctimas de violencia estatal. “Generaron un símbolo, conocidas como las mariposas Mirabal, que fue tomado internacionalmente y tomado como emblema”, afirmó y destacó que la Ley Micaela tiene un origen chaqueño.

“Debemos aprovechar estas instancias”
“Uno de los aspectos valiosos de este tiempo de prueba para la humanidad, es que nos sirve para reflexionar cómo estábamos, cómo estamos y prepararnos sin apresuramiento para lo que vendrá”, señaló la presidenta del STJ, quien valoró las ventajas de la digitalización hasta el retorno de lo presencial. “Hasta que llegue ese momento, debemos aprovechar estas instancias”, sostuvo, y agregó: “La virtualidad, que ha sido una herramienta legítima de accesibilidad, muy valiosa, debe continuar. Cuando esto pase y vuelvan los ámbitos presenciales tan saludables, que no se pierdan estos espacios de accesibilidad. Que esto continúe, más allá de que lo presencial es enriquecedor, insustituible y va a volver”.

Luego recordó a María Luisa Lucas “una mujer tan valiosa, pionera, luchadora”. Destacó la “buena praxis del Poder Judicial chaqueño (donde) las presidencias son previsibles”, y que este año la presidencia le correspondía a Lucas, de quien subrayó “que tanto luchó por el Centro Judicial Género”. Grillo contó que cuando llegó al STJ en 2014, Lucas le pidió que “la auxilie para que ese centro pueda tener realmente vida. Y lo hicimos posible”. Destacó la labor de quienes lo integran “tres mujeres tan valiosas”, y recordó a su primer responsable, Gabriel Duarte. “Esto es parte de la historia que hay que tener presente, porque como nos enseñan los sicólogos, es parte de nuestra identidad”. “No somos fungibles, dejamos huellas, y tenemos el deber de hacerlas trascender a través del tiempo, como nos enseñan en el sentido d la sabiduría ancestral nuestros pueblos y naciones indígenas”, sostuvo luego, al tiempo que reflexionó: “desde ese lugar, la perspectiva de género, con sentido coherente, no en el discurso, debe ser parte de nuestra manera de ser; singular, intransferible y colectiva. Representando como un rostro humano femenino, de mujer, y como parte de un colectivo que no puede soslayar sino que debe levantar cada vez con más vigor la mirada y la perspectiva de género, digo: acá estamos, para aprender, para ratificar nuestro compromiso con una justicia más justa, en el verdadero sentido de la expresión, y para reconocer nuestras ignorancias”.

Luego de escuchar el comentario de Alejandro López, uno de los asistentes, Grillo agregó “Que el tiempo cronológico no nos limite ni sea un obstáculo para desarrollar nuestras potencialidades que son inconmensurables. Como constitucionalista dejo un aporte para el próximo encuentro que puede estar en febrero o marzo, en el mes de la mujer: la propuesta es tomar un dato de nuestra realidad ¿Qué entendemos por seguridad?”. “Cuando hablamos de seguridad estamos haciendo referencia a libertad, a garantías, a protección, a tutelas, pero no en el sentido tutelar desde una posición de poder; sino un espacio horizontal, en espiral, en sentido circular, no cerrado, fraterno. Dentro de ese concepto de seguridad, democrático, reconociendo las legítimas diferencias, las leyes son parte de esas seguridades y garantías; convenciones que establecemos en un sistema democrático. Debemos cuidarlas y quererlas, y para eso debemos interpretar de una vez por todas que no son patrimonio de abogados/as. Las leyes dentro de las cuales están los tratados de DDHH, están para darnos respuesta, porque hace mucho tiempo, en una misma sintonía, escucho lo mismo. Y eso me apura en tiempos calendarios: siento que no estamos dando las debidas respuestas que nuestra ciudadanía necesita imperativamente de nosotras y nosotros. Debemos monitorear qué hacemos cada día. Interpelarnos con humildad”, reflexionó

Erradicar situaciones
Profesora y formadora en diversos niveles académicos, Delgado planteó que el encuentro “nos trae como reflexión qué estamos haciendo, qué no, qué podemos hacer para erradicar estas situaciones de violencia y muertes producidas por esta cuestión (de la violencia) de género.

Elizabeth Narváez, psicóloga, valoró el apoyo de Grillo a la gestión del CJG, que integra, y dedicó su exposición a la Ley Micaela y a “qué hizo que se gestionara, que se hiciera esta ley”. Articuló su análisis con otras normativas que la sustentan y con el código de ética de la Federación de Psicólogos de la República Argentina y del Chaco.

Ileana Díaz, psicóloga del equipo interdisciplinario en el fuero penal, se refirió a los alcances de la ley 26485; definió los tipos de violencia, invitó a leerla, estudiarla, compararla y analizar su riqueza “que resulta de utilidad para nuestra práctica cotidiana”, e instó a sus colegas “a capacitarse permanentemente en el tema de violencia contra la mujer, para poder orientar, acompañar, y abordar cada caso que se nos presenta”.

Fuente: Servicio Informativo Judicial Digital. SIJ